jueves, 4 de febrero de 2010

CURSO, FRITANGA y ¡¡¡¡AY MI AMOL!!!

No es que tenga especial interés en contar la crónica de un curso de aikido. La verdad. No es algo fácilmente relatable. En los cursos pasan muchas cosas, algunas contables y otras no tanto, que quedan grabadas en la memoria de los practicantes "per secula seculorum", y son recordadas y comentadas en las reuniones aikidokiles, al calor de un buen brasero acompañadas del correspondiente Gyn Tonic, o Beefeater con algún Spirit o similar. Pero en esta ocasión, creo que voy a hacer una excepción, y como no tengo nada mejor de lo que hablar, voy a narrar la crónica del primer viaje que pude realizar con mis alumnos a un curso de aikido, siendo para mí un motivo de satisfacción personal, ya que nunca había asistido acompañado de la gente a la que tengo el placer de dirigir su práctica, al menos de momento.

Así pues, durante un tiempo se estuvo mirando la lista de cursos disponibles, cuadrando horarios, viendo disponibilidades, y todo lo que representa estar un par de días fuera de casa. Finalmente, después de realizar descartes, se llegó a la decisión final entre dos cursos.

-- Populus: ¡¡ Málaga está más cerca!!
-- D.V.: ÉEEESSSTTTTEEEEE!!!!
-- Populus: Ohhhh D.V. pero Málaga está más asequible....
-- D.V.: ÉEESSSTTTTTEEEE
-- Populus: Ohhh D.V... pero Madrid es más caro.......
-- D.V.: EEEESSSSTTTTTEEEEEE

Como veréis, siempre la democracia funciona. Un hombre un voto. Fueron dos votos a favor de Málaga (populus), una abstención (Cyborg no valía) y uno a favor de Madrid por el D.V. El voto de D.V. siempre vale populus+1, por tanto D.V. gana y todos contentos, celebrando la pulcritud y limpieza de los comicios.

Segundo punto del orden del día. El medio de transporte. Ni que decir tiene que el D.V. no tenía la más mínima intención de conducir durante la ida, menos durante el transcurso e, infinitamente menos, durante el regreso. Por consiguiente, había que elegir entre los coches de los acólitos. Como era tradición en el D.V. viajar en un Seat Córdoba, pues la democracia volvió a funcionar, y se escogió el Córdoba del Abuelo Esteban. Viajaríamos como sardinas en lata, pero eran los designios divinos.. así que a apencar y para alante.

Por fín llegó el gran día. Quedamos en la puerta de la casa de Mitch, "puntualidad absoluta", cargamos el coche, que parecía que ibamos a cruzar nosotros también el Estrecho, y comenzó la singladura por esas tierras dejadas de la mano del Pater.

Como el vehículo era del Abuelo, el Abuelo conducía. Así, nos trasladamos a velocidad senil (o sea, nos dio tiempo a hacer un reportaje fotograma a fotograma del crecimiento de las vides de Valdepeñas) mientras el driver nos amenizaba con la música de Rock & Gol, y nos narraba leyendas acerca de las "grandes personalidades" que habían ocupado anteriormente los asientos en los que el D.V.tenía sus posaderas. Personajes como "Jenny la Artillera", soldado-actriz-porno conocida por todo el batallón y, que por aquellos tiempos, se preparaba el papel de Caperucita Roja en una superproducción.

Mención aparte merece el hecho del número de paradas realizadas. Pareciamos un paso de Semana Santa.

-- Me meo (Mitch)
-- Hay que comer (Populus).
-- Un cafelico estaría bien (Mitch).

Total, que si tenemos en cuenta que la distancia entre Almería y Madrid es considerable, que viajamos a velocidad absurda, y que paramos unas pocas de veces, casi no llegamos y eso que salimos el día de antes.

Bien, hasta aquí todo correcto. Largo pero correcto. Ete aquí que por fín, cual hermano Pinzón, avistamos tierras madrileñas. Ahora faltaba encontrar la pensión donde ibamos a alojarnos. A priori, por Internet tenía buena pinta. No parecía de esas en la que las chinches te sacan por la noche al balcón, para que tomes el fresco, mientras te roban la cartera y se lavan con tu cepillo de dientes. A priori.

Cuando llegamos nos encontramos con la escena de un par de TONTITOS en el bar de la Pensión, que clamaban gozosos por ser pateados de forma percutente y persistente en sus diminutos escrotos, y con un aroma a fritanga delicioso en todo el recinto. ¡¡¡¡¡Mmmmm sabroso!!!!.

Cogimos las habitaciones. La del D.V. no estaba mal. Cama grande. Cuarto tipo abuardillado en maderas nobles (ja ja ja ja ja, que me parto), televisión Samsung, baño en condiciones y, la verdad sea dicha, limpio. "Al menos no me comeran los microbios el .... cuando me siente en mi trono", pensó el D.V. levantando la tapa. No obstante, plastificar la tapa.... por si acaso.

El populus no tuvo tanta suerte. La habitación daba a la fachada principal, con lo que la fritanga entraba por cada uno de los rincones e intersticios del cuarto, dejando un aroma ambiente francamente acogedor.
"¿Tendrán libro de sugerencias por lo del olor?", preguntaba Mitch. "Si, libro.. si.... ", respondía el D.V. "¿Qué coño van a tener?"... Dos camitas, para dos tios grandes, pegaditas la una a la otra, también para fomentar la intimidad y el "mejor conocimiento entre ellos" y un baño. No era tipo buardilla, que estaba reservada únicamente para la divinidad. Los acólitos.. AL FERRY.

Descargamos el equipaje ante la mirada inquisidora y comentarios de los TONTITOS, y salimos a un Burguer para cenar.

Pasó la noche. Una noche movidita. Estando en la cama, a duerme vela, comienzo a notar extraños ruidos y golpes en la pared de la cabecera, provenientes de la habitación contigua. "Una parejita. Pues como sea un picha brava me va a joder la noche", pensó el D.V. Ella era muy pero que muy jadeosa y él, del otro lado del charco, en principio no decía nada, no se le oía. Afortunadamente, tampoco es que él tuviera un empuje muy grande de abdominales, porque a la tercera o cuarta embestida, pues ya. Pero ya del todo.... "AY MI AMOL, AY MI AMOL... I LOVE U, I LOVE U, I LOVE U". Después silencio. Un poco decepcionante, con menos fondo físico que Steven Hawking. El D.V. entró en cólera. "Échale valor chaval.... " (bueno realmente no dijo eso.. pero es irreproducible aquí. Que es horario infantil....).

Por la mañana, desayuno en la habitación y al curso. Coño con el pabellón. Los pingüinos poniendo las planchas que faltaban, los leones marinos por allí, los iglús para cambiarse.. ¡¡¡¡Armilla es el Caribe!!!!!. Empieza la sesión. Trabajo sobre diversos agarres. Cambiando de técnica con velocidad. Mucho laxo, mucho blandito, demasiado bala cañón, alguna gente (contadas con los dedos de una mano y me sobran) con la que se podía practicar bien, mucho tontito, algún que otro corrector, alguna que otra reencarnación de O'Sensei.... fauna variada.

Volvimos a ducharnos al hotel, porque el agua estaba fría. Nuevamente los tontitos toca escrotos en la puerta dando el coñazo y metiéndose con nosotros. El D.V. es parado por sus acólitos porque ya empezaba a dejar ir su cólera. Ducha y comida. Vuelta a Fritanga Road a sobar un poquito y de nuevo al curso.

Es aquí, en la sesión de la tarde, en la que se trabajó exclusivamente Shomen Uchi, cuando el D.V. notó una perturbación en la Fuerza. Mira a izquierda, mira a derecha y AAAAAHHHHHH. Encuentra a su Archienemigo, el reverso tenebroso ("pavo con aires de villano de pelicula ochentera, andares de palomo y gomina como para deslumbrar al congelado público....... ") practicando con el Nexus. Recordando los mejores tiempos de Goku en sus enfrentamientos con Picolo, al D.V. le salió pelo rubio a modo de llama, realizando la fusión por si las moscas..... La sangre no llegó al río, y todo transcurrió con normalidad.

Fué al final de la jornada, cuando ocurrió el Gran Momento. Doblaba el D.V. su hakama, y alzando la vista, se percata que el Archivillano está codo con codo, realizando la misma labor. Es en este instante, cuando se inicia el siguiente diálogo:
-- A: ¿De Almería?.
-- DV : Aaaaammmm Si. (Cara de decir.. Aquí se está cociendo una torta pero de las gordas.... En ese momento, el DV alza la rodilla derecha en una clara posición de preparado.. por si acaso).
-- A: ¿De Roquetas?
-- DV: Aaaammmmm Si. (El DV deja de doblar el hakama ante las cuestiones planteadas... Mejor tener las dos manos libres....).
-- A: Pueden mas dos tetas en Roquetas.... ja ja ja ja ja... (??????????¿¿¿¿¿¿¿¿. Lo cierto es que el DV respira aliviado. No había ganas de tortas...).
-- DV : Pues sí. Eso dicen. (¿Qué coño iba a decir?. Ahora viene la frase estrella).
-- A: ¿Sois muchos?. (¿En Almería?. ¿En Roquetas?. Por deducción de Sherlokas Holmenskas (en lituano y no es coña) se refiere a si somos muchos practicantes en mi dojo.. Ni que decir tiene que no le digo que tengo un grupo más o menos grande.. por si acaso).
-- DV : Pos no muchos. Normal.
-- A: Yo he dado curso cerca, en Punta Umbría. (EEeeemmmm Punta Umbría-Almería. Pues si nada mas que doblar la esquina, para dar un paseico al yayo....Al laico vamos).
-- DV: Ya ya. Bueno... (El DV coge el hakama de un tirón y se despide... )

Después de esto, tengo que reconocer que al DV le quedó la mente laxa. Por un instante fui el ejemplar uno del Laxo. Una experiencia UFO como la relatada, conlleva un gasto mental y de neuronas dificilmente recuperable. Con fuerza y usando una gran cantidad de maná, logramos resurgir de nuestras cenizas y dirigirnos hacia las duchas. Ya no comprobé si estaban o no arregladas. Directamente al hotel.

Que tarde es ya.... en cuanto a la última sesión de curso y la vuelta... pues.... "Muchas fueron las andanzas del DV.... pero eso, ... eso es otra historia...."